El fenómeno de la okupación es cada vez más recurrente en nuestra región. Por cierto, un análisis llevado a cabo recientemente por el Ministerio de Interior revelaba 13.389 denuncias en los 9 primeros meses del 2021, lo cual implica un 20% más que a lo largo de el año anterior. Si es comparable con las cifras conocidas hace 5 años, el incremento de la okupación es del 40%.
En la actualidad se calcula que hay en nuestro estado bastante más de 120.000 casa okupadas, “principalmente en Cataluña, con más del 40% de las denuncias, una cifra que es casi 4 veces mayor a las cifras de Madrid y 3 veces más que en Andalucía, y por arriba de la Sociedad Valenciana, Castilla La Mancha o Murcia, donde tampoco se libran de este fenómeno”, asegura Jesús Duque, vicepresidente de Alfa Inmobiliaria, con 112 agencias franquiciadas en España, y 113 oficinas más a grado universal (México, República Dominicana, Bolivia y Francia).
Una de las propiedades de estas casas, en crítica de Duque, es que varias de ellas provienen de herencias. “Al estar un largo tiempo vacías estas características se quedan más desprotegidas y son presa fácil”, confirma.
Múltiples males para el dueño
Los males para el dueño son diversas. “Dejando de lado los inconvenientes emocionales a los que lleva este caso, una casa okupada tarda, de media, entre 3 y 6 meses en ser recuperada por su dueño, en el mejor de los casos. A ello tendremos que sumar los costos de abogados, la cuantiosas reparaciones que el dueño debería abordar tras el desahucio, y, en el mejor de los casos, el pago de gigantes porciones a los causantes de la okupación para ahorrarles este calvario y recobrar su casa en menos tiempo”, incorpora Duque.
Por esto, la red Alfa Inmobiliaria ha llevado a cabo un análisis interno que cifra en un 30% el descuento que los propietarios permanecen dispuestos a hacer en el momento de vender una casa okupada, y deshacerse del problema.
Todavía de esta forma, no es simple vender una casa okupada. Ciertos de los motivos son evidentes: el dueño no va a tener fotos de los probables desperfectos que va a tener la misma cuando sea viable recuperarla, tampoco conoce la época que llevará el proceso de desahucio, que suele demorarse meses a pesar del denominado “desahucio express”, ni los costes que mucho el proceso judicial como la reforma van a dar por sentado.
Empero además, el nuevo dueño deberá abordar varios costos a partir del mismo instante de su compra, y pese a no tener derecho a su goce como son el ITP (Impuesto de Transmisiones Patrimoniales), “si bien existe un cierto dilema para el cliente ya que su costo de compra en dichos casos es evidentemente más bajo que el costo de mercado, que marca el impuesto a pagar”, incorpora Duque.
Todos dichos motivos permanecen ocasionando además que, la era medio para vender una casa de estas propiedades, ronde los 10 meses, bastante por arriba del plazo medio de comercialización de una casa en cualquier metrópoli española, si bien Alfa Inmobiliaria ya empieza a ver organizaciones especializadas interesadas en obtener esta clase de características.