Convencionalmente España fue un territorio de propietarios. La casa canaliza la mayoría del ahorro de los españoles, que a raíz de la enfermedad pandémica alcanzó máximos históricos, y cada vez más los particulares apuestan por la inversión en esta clase de inmuebles de manera adicional a la casa de uso común.
Esta tendencia se consolida además en un escenario de incertidumbre como el que estamos atravesando gracias a diferentes componentes como el problema bélico en Ucrania, un escenario de alta inflación y crecimientos históricos en el costo de la energía y el petróleo.
Este creciente hambre por mercar casa como inversión se ha constatado este año en el Salón Inmobiliario de Madrid (SIMA) debido a que se espera que un 13% de los visitantes acuda a la feria con este objetivo. De esta forma lo explica a elEconomista Eloy Bohúa, director de Planner Exhibition, organizadores de SIMA, que garantiza que esta tendencia lleva diversos años creciendo a partir del 10% que representaba en 2019.
"Lo cierto es que el cliente de casa común, que representa el 75% de los visitantes, todavía es mayoritario, empero la tendencia acusa hacia una caída en detrimento de otros productos, no solo la inversión, además la segunda residencia o la casa turística. Estas son otras 2 tendencias que se permanecen consolidando este año", muestra Bohúa. De esta forma, el directivo garantiza que "se aprecia aquel goteo de gente cada vez más numerosa que busca un producto que no es primera casa. En la situación de la segunda residencia veníamos de porcentajes del 6% y este año se ha posicionado en el 9%".
En la situación de la inversión el foco está bastante centrado en Madrid, "algo que es regular además por el propio ADN de la feria, debido a que este año de las cerca de 15.000 casas que se ofertarán en SIMA, un 60% estarán en la Sociedad de Madrid". De cualquier modo, lo cierto es que, "la presión inversora en localidades como Madrid y no hablo de inversor profesional, además del especial, es primordial y esto se refleja en la demanda de la feria".
Según detalle Bohúa, hablamos de un público mayoritariamente interesado en casas en región urbana, si bien, "cada vez más abierto a otras posibilidades". Esto se debería a que "ha crecido mucho el inversor en casa turística y en esta situación el foco primordial está en Alicante y Málaga".
En las encuestas que se hacen a los individuos que van a ir a la feria se les pregunta sobre qué tipo de inmuebles desean conseguir y el 86% espera mercar casa en regiones urbanas. Además, un 41% además busca activos en regiones turísticas. Lo demás de posibilidades de inversión son menos representativas, debido a que alrededor de un 15% desea conseguir locales comerciales, terrenos o plazas de garaje, en lo que solo un 5% busca pequeñas oficinas, naves o trasteros, según los datos que maneja Planner Exhibition.
En la situación de la inversión "el 75% de los encuestados se mueve con tickets de hasta 300.000 euros", explica Bohúa, que muestra que año tras año el presupuesto como para inversión como para compra de casa común crece, si bien, "lo hace a un ritmo menor al que lo realizan los costos de la casa, constantemente se mueve diversos puntos de vista por abajo", lo cual es un indicador bastante más de cómo se está complicando de manera progresiva la entrada poblacional a la compra de una casa.