Hace tan solamente unas semanas, un análisis de la red inmobiliaria Comprarcasa cifraba en un 50% el aumento en la demanda de segunda residencia para uso propio. Ahora, una proptech de España da la probabilidad de transformarse en dueño de una vivienda de 1,4 millones de euros por tan únicamente una inversión de 175.000 euros. Una operación basada en la compra fraccionada de una propiedad avalada por un marco jurídico escrito por un despacho de abogados de enorme renombre.
Vivla es la compañía que busca liderar esta clase de compras en la parte sur del continente Europeo (respaldada por el fondo americano de capital semilla FJ Labs, el venture capital barcelonés Extension Fund y el del Reino Unido Fasanara, entre otros inversores). El modelo de comercio es sencillo. El interesado en obtener una segunda residencia en España se puede juntar hasta esta organización y:
- transmitirle de cuánto dinero (presupuesto) dispone;
- qué localización le interesa;
- cuántas semanas le agradaría contar con del activo.
"Por regla establecida las segundas residencias se acostumbran utilizar unas 6 semanas al año. Por esto hemos dividido las características en octavos, dándote cada octavo derecho a 6 semanas de propiedad", confirma Carlos Emilio Gómez el CEO y cofundador de Vivla y de otras proptech como Rento, vendida a Pryconsa tal y como adelantó en única idealista/news.
Según los datos facilitados por la startup, solo en la parte sur del continente Europeo hay 18 millones de casas que se aplican tan solo un 15% del tiempo, y millones de de Europa interesados en contar con una casa para unos meses en la parte sur del continente Europeo. "Vivimos en una sociedad muchísimo más flexible donde la utilización compartido está extendido en varios mercados y el de la segunda residencia pienso que requiere un nuevo criterio", confirma Gómez a idealista/news.
Varias voces han apuntado a este modelo de compra fraccionado como una réplica de la multipropiedad, empero Gómez aclara las diferencias que hay entre los dos modelos. "La verdad es que con la multipropiedad no eras dueño de nada, únicamente pagabas por un derecho de uso, sin embargo al finalizar no eras dueño. Con la compra fraccionada respaldada por la firma de abogados Garrigues el interesado se convierte a partir del primer instante en dueño del inmueble en cuestión, en funcionalidad de lo cual haya pagado. Esto quiere decir que ha llevado a cabo una inversión inmobiliaria y que en cualquier instante puede desbaratar su postura vendiendo su parte de esta", afirma el CEO de Vivla.