España requiere más casas de arriendo y una inversión multimillonaria para lograr adecuar la oferta a la demanda en las siguientes 2 décadas.
En la actualidad, una de cada 4 familias en España habita en sistema de arrendamiento y el área inmobiliario estima que esta elección habitacional irá comiendo lote a la propiedad, impulsada por componentes como el encarecimiento de la financiación y los esfuerzos para entrar a una hipoteca, los cambios socioculturales que promueven la movilidad y el pago por uso; y el recorrido al levanta que aún tiene el mercado en España hasta equipararse a los niveles de Europa.
Diversos profesionales del sector han puesto cifras a dicha necesidad de vivida a lo extenso de las jornadas SIMA Pro, en el marco del Salón Inmobiliario de Madrid.
Teresa Marzo, CEO de Elix, ha asegurado "en la actualidad unos 4,5 millones de domicilios viven de arrendamiento, alrededor de un 24% del total poblacional. En los siguientes años vamos a ver un crecimiento que nos acercará más a los niveles de Europa, donde el 35% de las familias vive de arrendamiento. Poseemos que producir unos 2 millones de casas de inquilinato en los siguientes 20 años, 100.000 todos los años, lo cual supone que hay demanda para un mercado que se debe edificar".
La consultora Colliers estima que este desafío exigirá unos 250.000 millones de euros de inversión, cifra que supera con creces lo cual ha presupuestado el Regimen para costear las pensiones en las cuentas públicas de 2022 (170.000 millones de euros),
Para conseguir esta inversión de un cuarto de billón de euros, "se necesita ofrecer cabida a los inversores institucionales, ya que la producción de novedosas casas en España está en unos niveles reducidos", ha agregado Antonio de la Fuente, managing director-corporate finance de Colliers.
Según los datos del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), los visados de novedosas casas se situaron en algo bastante más de 108.000 unidades en 2021, de los que el 97% estuvo ligado al mercado de la compraventa. No obstante, las previsiones apuntan a que en 2 años los visados de obra nueva involucrados con el inquilinato cogerán fomento y que pasen del 3% presente al 13%.
Una normativa a extenso plazo
El área además ha insistido en la necesidad de generar un marco normativo estable y garantista que sea llamativo para el inversor mundial, al que clasifica de imprescindible como para invertir en el mercado de inquilinato como para fomentar mucha oferta en poco tiempo.
"En inversión ahora competimos con otras ubicaciones. España compite con otros territorios y las sociedades autónomas compiten unas contra otras. Sin embargo como territorio debemos ser capaces de producir un ámbito estable y conveniente para la inversión", ha recalcado de la Fuente. Y ha agregado que, "con un poco bastante más de flexibilidad regulatoria, podríamos movilizar cientos de millones de euros de inversión".
Marzo, por su lado, ha insistido en que los gigantes 'players' de todo el mundo interesados en el mercado de casa de inquilinato proyectan sus inversiones a extenso plazo. Por esa razón, ha recalcado a la Gestión la necesidad de reforzar la estabilidad jurídica y huir de políticas coyunturales. "La casa no puede depender de quién gobierne. Como territorio debemos mandar un mensaje claro a los inversores, un plan de Estado con garantías y a largo plazo", ha señalado.
Eduardo Guardiola, managing partner de Catella Investment Management, y Jesús Ruiz, senior development director de Greystar, además han aprovechado la ponencia para exigir a la Gestión una más grande velocidad en la concesión de licencias y trámites urbanísticos, que saque al mercado más suelo para lograr impulsar casa, mejorar la fiscalidad del arriendo e promover la digitalización para minimizar los plazos burocráticos.