Tras años de disputas internas en el Régimen de coalición, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) ha acordado con su socio Juntos por nuestras propias fuerzas aprobar un plan de ley de casa presentado por empresas de la sociedad civil, con el que el Regimen de Pedro Sánchez cumplirá uno de los compromisos adquiridos antecedente de su toma de posesión.
El plan de ley ha sido presentado el 30 de septiembre por los sindicatos de inquilinos, Nadie Sin Hogar y la Plataforma de Dañados por la Hipoteca, entre otros. En aquel instante contaba con la ayuda de 9 partidos políticos, sin embargo, su aplicación dependía del asentimiento gubernamental, que se obtuvo en la primera semana de octubre.
Según Fernando Bardera, representante del Sindicato de Inquilinos de Madrid, uno de los impulsores del plan, el archivo obligará al Estado a tomar medidas semejantes a las existentes en territorios vecinos hace unos años. Entre ellas, precisar los desahucios y asegurar que únicamente se desaloje a quienes tengan una solución habitacional opción.
A medida que tanto, el parque de casas públicas incrementará a partir del casi inexistente 1,5% de hoy. Referente a los alquileres, habrá un tope en las regiones consideradas estresantes, o lo cual es lo mismo, donde los costos de los alquileres son muchísimo más elevados que los salarios de los individuos que tienen la posibilidad de abonar en aquellas regiones.
"Lo cual se hará es regular lo cual se puede y lo cual no se puede hacer. Y esto no es nada nuevo, pues igual que van a mencionar que lo mayor que se puede solicitar por el alquiler es tanto, ahora la normativa además nos dice, ejemplificando en Madrid, que son imposibles de hacer fiestas a las 6 de la mañana", describió Fernando Barder.