La pandemia reaviva el interés por los inmuebles fuera de los grandes centros de Burgos

La pandemia reaviva el interés por los inmuebles fuera de los grandes centros de Burgos

Con la llegada de la pandemia del covid-19, muchas personas volvieron sus ojos hacia los pueblos, en busca de espacios abiertos y una mayor libertad que la que ofrecen la mayoría de las casas del centro de la ciudad. Y ese pequeño cambio de mentalidad parece haberse convertido en una tendencia, a la vista del aumento de la demanda de casas y chalets fuera de los grandes núcleos de la provincia.

Así lo confirman fuentes del sector en Burgos, que han constatado una buena evolución del mercado inmobiliario en el medio rural en los últimos meses. Según Óscar Ortega Delgado, presidente de la Asociación de Agentes y Gestores Inmobiliarios (AEGI), se trata de un "repunte" de la demanda que comenzó a verse tras el pasado verano y que aún no se ha detenido, aunque aún es pronto para saber si es un punto de inflexión. "Habrá que esperar al menos hasta la primavera del año que viene para ver si la tendencia se consolida o si es temporal", explica.

Lo que está claro es que en los últimos meses estamos viendo más movimiento en el sector de lo que era normal hace años, aunque con diversos matices. Así, el interés va por zonas, y se centra concretamente en el entorno de las grandes poblaciones de la provincia, con especial incidencia en el alfoz de la capital y en Las Merindades, zonas cercanas a poblaciones dotadas de todos los servicios necesarios. Así, "las viviendas de la España Vaciada no terminan de entrar en el mercado", subraya Ortega.

A partir de ahí, el perfil del demandante varía mucho, dependiendo de la zona y del uso que se quiera dar a las viviendas. Así, en el alfoz se mueve mucho el mercado de primeras residencias, mientras que en otras zonas de la provincia son las segundas las más demandadas. Además, la gran mayoría del sector está dominado por las operaciones de compraventa, con una escasa presencia de la fórmula del alquiler.

El tipo de viviendas que más se demandan en los últimos meses son las unifamiliares (adosados y chalés), "listas para entrar a vivir" y, sobre todo, "con una pequeña parcela o jardín". "La gente ahora no quiere meterse en grandes reformas o terrenos para construir su casa desde cero", explica el portavoz de la patronal del sector.

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