El término de interés social referente con la casa puede parecer extraño en la actualidad comparativamente con las claves usuales del ahorro, como el rendimiento, la liquidez y el peligro. Sin embargo la verdad es que los españoles siguen destinando la mayoría de sus ahorros al sector inmobiliario en detrimento de las inversiones financieras en una cantidad de 4 a uno. Y no solamente para mercar una primera casa, sino además para gozar de una segunda residencia o para mercar con vistas a producir ingresos por alquiler.
A diferencia de lo cual pasa en los mercados financieros, en la zona de la casa los datos no resultan muy homogéneos. Los datos facilitados por el Banco española presentan que en el segundo semestre de 2021 en España el incremento del costo de la casa y la productividad del alquiler, sumados, alcanzaron una tasa anualizada del 7.1%. El crecimiento de los costos de la casa contribuyó en 3,4 puntos de vista a esta cifra y las ganancias brutos por alquiler (excluyendo los costes) en 3,8 aspectos. Hablamos de niveles en los cuales se mueve el mercado inmobiliario, bastante mejores al 0,4% alcanzado por las compras de bonos del Estado o al 0,6% de los depósitos bancarios. No obstante, un 8% para la casa está bastante lejos de los ingresos que ha tenido la bolsa de España en esta etapa de comparación: 32%. De esta forma, la casa no padeció a lo largo de la mayoría de la enfermedad pandémica de Covid-19.
Sin embargo en los últimos meses ha entrado en juego la inflación, que según los datos preliminares de noviembre se localiza en el 5,7% y va a ser una variable fundamental para la productividad real final (nominal menos la inflación) en cualquier inversión, así como en la casa.
Queda claro que los costos de la casa han subido en 2021 y que se han mantenido inesperadamente elevados a lo largo de el año "contagioso" de 2020. Luis Corral, director general de Foro Consultores Inmobiliarios, apunta a Madrid, Barcelona y Málaga como las capitales con más demanda de casa y, de manera, con costos al alza.