Tras bastante más de 20 años de vivencia mundial, la agencia inmobiliaria suiza Kensington Finest Properties International inicia su extensión en la España peninsular. Implantada como agencia boutique en Mallorca y con bastante más de 70 franquicias en Alemania, Suiza, Austria, Dubai y España (cuenta con 12 oficinas en Baleares), la inmobiliaria aterriza en Madrid para liderar el área del lujo a partir de su sede en el barrio de Salamanca.
"Pese a la carencia de movilidad de los consumidores e inversores de todo el mundo gracias a la coronavirus, los niveles de actividad ya se permanecen recuperando, en especial en mercados clave como Madrid y la Costa del Sol. Esperamos un óptimo año en términos de volumen de operaciones en 2022", comentó Mehrdad Bonakdar, fundador y CEO de Kensington Finest Properties International.
Con pocos meses de vida en Madrid, "ya estamos operando en las regiones de Salamanca y Chambery y poseemos buenas perspectivas de otorgar novedosas licencias de franquicia en otras regiones de la metrópoli y alrededores en los siguientes meses. Prevemos que en 2024 habrá 10 características boutique en el sector metropolitana", asegura Pablo López Pérez, master franquiciado de Kensington en la sociedad de Madrid.
La cadena en la ciudad más importante se reúne en la actualidad en los inmuebles residenciales, aun cuando la compañía planea entrar en los sectores de oficinas, hoteles, comercios minoristas y no residenciales para 2022.
"Como cualquier otro mercado inmobiliario mundial, en Madrid hay diferentes puntos en cuanto al producto demandado. Continúa la demanda de inmuebles residenciales de parte de habitantes y extranjeros de Latinoamérica y Europa Central, sin embargo además existe una intenso demanda a causa de inversores de todo el mundo, que ven en la ciudad más importante uno de los mercados de Europa con más potencial referente a oportunidades de comercio e incremento de la productividad en los siguientes años", comentó López Pérez.
Referente a la oferta de activos en Madrid, se ha aumentado en los últimos meses como resultado del paulatino levantamiento de las limitaciones a la circulación de individuos, así como de otros componentes puntuales, como la compraventa de casas que anteriormente se destinaban al alquiler turístico. "No obstante, de instante no hay indicios de un exceso de oferta que presione la caída de los costos, que siguen contenidos con una ligera tendencia al alza", asegura López Pérez.