La provincia interesa cada vez a más extranjeros que buscan mercar casa. Aquel es un mercado boyante ya que centra 2 propiedades clave: oferta variada y costos ajustados, menores que los de otras regiones de Galicia y alejadísimos de los que alcanzan características semejantes en los sitios de procedencia de los consumidores. Se gastan una media de 150.000 euros en mercar y otros 200.000 en componer, aunque, obviamente, hay excepciones.
Rosy Costoya es la directora general de Galician Country Home, una organización implantada por su esposo, Mark Atkinson hace 20 años una vez que él hizo a partir de Manchester aquel mismo viaje que en los últimos años, además en este de creciente inflación y futuro incierto, permanecen realizando varios compatriotas, rendidos frente a los encantos de Galicia y su calidad de vida.
La sede de la firma está en Rábade y la más grande parte de las características cuya comercialización gestionan está en la provincia de Lugo empero labora en toda Galicia. El 85% de sus consumidores son extranjeros y explica que el rango de costos que abonan es variadísimo. "Los se debe desean una vivienda pequeña y aspiran invertir unos pocos una cantidad enorme de euros en una casa para reparar y residir en ella o para utilizar en vacaciones. Hemos vendido alguna por poco bastante más de veinte mil euros. Empero además poseemos consumidores que se interesan por negocios que han cerrado, ya fuese a efecto de la enfermedad pandémica o por jubilación de los propietarios. Desean invertir en una vivienda u hotel rural, donde vivir empero además tener un diminuto comercio. Por igual, hay fondos de inversión que buscan características mucho mayores, como pazos, con potencialidad para amparar hoteles de más grande tamaño", explica.
"Por regla general buscan viviendas en regiones recluidas o núcleos pequeños, casas clásicos y con carácter, con lote y buen paisaje alrededor", explica Sonia Parcero, arquitecta técnica que lidera Materia, una consultoría de construcción que luego de comenzar sus pasos en Lugo acabó abriendo además una oficina en Quiroga frente a la demanda en el área.
En los últimos años parte importante de sus consumidores son extranjeros que anhelan componer una vivienda en la provincia para vivir y teletrabajar o para residir luego de jubilarse. Parcero surgió y vivió en Holanda hasta los 10 años por lo cual habla con fluidez holandés e inglés, lenguajes que son comunmente herramientas de trabajo.
No duda una vez que se le pregunta cuál es la forma en la que sus consumidores extranjeros conocen Lugo. "Una parte importante realizan el Camino y se enamoran de Galicia", explica. Exactamente aquel mismo verbo usan varios de los entrevistados para este reportaje, que cuentan cómo visitan la provincia y se realizan devotos de la manera de vida. "Les fascina el paisaje, el clima, la población... Buscan un espacio tranquilo donde vivir y lo hallan aquí", apunta.
En lo demás de provincias gallegas, las regiones que más interés despiertan son Cerdido en A Coruña, Amoeiro en Ourense y O Covelo en Pontevedra. Si el abanico se abre al grupo española, la ciudad no costera con más llamativo para los potenciales consumidores de casa extranjeros es Localidad Quesada, en Alicante. El segundo poblado que registra un mayor volumen de búsquedas a partir del exterior está ubicado además en dicha provincia y es Busot. Bastante alejada de la costa, el podio lo completa Ciudalcampo, en Madrid.