Disfrutar de surfear las playas de Cádiz durante una pausa para comer en una multinacional americana, o pasear por Puerto Banús creando contenidos para una de las principales organizaciones de comunicación de Francia es perfectamente viable, y cada vez son más las personas que optan por este estilo de vida a la hora de viajar.
Ser nómada digital es un estilo de vida en crecimiento, profesionales que pueden trabajar desde cualquier parte del mundo, el único requisito es un buen acceso a internet. Muchas de estas personas, que viajan por todo el planeta en busca de las mejores condiciones de vida, han encontrado en Andalucía, especialmente en Cádiz y la Costa del Sol, su lugar ideal.
El buen clima, el desarrollo del sector tecnológico, la cultura y, sobre todo, las conexiones globales que proporciona el aeropuerto, en la situación de Málaga, son los principales componentes que llaman la atención de estas personas, que llegan principalmente desde el norte y centro continente europeo.
Estos nómadas poco tienen en común con aquellas tribus prehistóricas que se desplazaban de un espacio a otro para cazar y pastar, aunque la esencia es la misma: vivir sin un espacio fijo y en busca de la máxima calidad de vida sostenible.
"Cádiz es un paraíso, aquí encontré la vida dulce, marcada por la amabilidad de la gente. Vivo en el casco antiguo y no necesito coche para nada, la vida aquí es maravillosa. Es una provincia rica en naturaleza , con las mejores playas españolas y bastante por Sevilla, donde también tenemos de todo”, comenta a elEconomista Andalucía Karine Grossman, propietaria de una agencia de comunicación en París, que lleva 3 meses viviendo en Andalucía tras visitar lugares como Tel Aviv. y Marsella, y en la actualidad está solicitando una visa para extender su estadía.
Grossman va a trabajar todos los días al Omni Work Center, un espacio de coworking que abrió en Cádiz hace cuatro años y cuyos clientes son casi todos nómadas digitales.
“Nuestro primer cliente fue un sueco, luego entró un ruso y, por lo tanto, la mayoría de los consumidores son extranjeros. Abrimos este espacio con el objetivo de brindar un espacio de trabajo a los emprendedores de la zona, y esta es la gente que vive en la vía, solo los españoles vinieron durante la pandemia”, explica Esperanza Gutiérrez, propietaria del espacio de coworking.
Adolescentes con experiencia, en su mayoría de Alemania, Francia, Holanda e incluso Estados Unidos, que trabajan en tecnologías de la información, desarrollo de aplicaciones, marketing y redes sociales, son el perfil más común entre los nómadas digitales que eligen Andalucía.