Hace unos años, la idea de comprar o alquilar una propiedad con criptomonedas hubiera sido casi inimaginable. Hoy, eso es más que una realidad. Con una capitalización de mercado total de más de $ 1 billón, las criptomonedas se han convertido en una importante moneda alternativa en la economía global y están encontrando un punto de apoyo en segmentos previamente disfuncionales. Reental, startup española de tokenización inmobiliaria, ha cerrado su primera transacción inmobiliaria financiada íntegramente con moneda digital. De hecho, ha sido una señal temprana para que el mercado inmobiliario adopte nuevos métodos de pago en la plataforma.
Las operaciones realizadas por la compañía se han concertado con un préstamo de 54.773 euros y han obtenido una ampliación de capital superior al 24%. Alberto Hernández, gerente digital de CBRE España, comentó: “Esto demuestra que la tokenización puede ser una alternativa atractiva para gerentes y usuarios finales”. La plataforma, fundada por Eric Sánchez, vende Sevilla 1, una vivienda de dos dormitorios, cocina y baño, por 68.000 euros, casi un 9% más de lo previsto. Ahora hay 33 propiedades token en la plataforma, con un tiempo de venta promedio de 2 minutos.
“Todavía estamos en la fase de 'early adopters', donde tenemos que generar confianza”, dijo Sánchez. Por lo general, quienes deciden invertir en este tipo de inmuebles son usuarios que quieren diversificar, que tienen “poco ahorro en el banco, sin tiempo para administrar la casa y que quieren dar sus primeros pasos en la inversión en criptomonedas”, señaló. señala, CEO de inicio el.
En el caso de Reental, los clientes pueden invertir en propiedades desde tan solo 100 euros en cualquier parte del mundo. De hecho, muchos de sus inversores proceden del extranjero y del mercado de habla hispana. “Esta es una forma de salvar su capital de la inflación en algunos de sus países. Es un producto necesario para rentabilizar su economía e invertirlo en el sector inmobiliario”, dijo Sánchez.
Para expertos como Hernández, la tokenización para múltiples propósitos puede verse como una alternativa a la revalorización de cierto tipo de activos. "El beneficio clave será la eliminación completa de las barreras de entrada para todo tipo de inversores, incluidos los minoristas. Esta democratización de la inversión permitirá a los operadores inmobiliarios acceder a un capital mucho más diversificado. La principal desventaja es el riesgo inherente a las tecnologías complejas, que históricamente han sufrido problemas de seguridad”, explicó a La Información.