El mercado inmobiliario de la provincia ha reducido el stock de viviendas a estrenar en casi 300, lo que no impide que Ciudad Real sea destacada por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana como una de las zonas en las que la resaca del boom inmobiliario aún deja un mayor porcentaje de viviendas que aún cuelgan el cartel de nuevo a la espera de un propietario.
Según las cuentas actualizadas la semana pasada por el Ministerio que dirige José Luis Ábalos, a 31 de diciembre del año pasado, Ciudad Real contaba con 11.037 inmuebles dentro de este stock de vivienda nueva sin dueño. Un año antes, en 2019, este stock superaba los 11.300 inmuebles.
Continúa lo que el Gobierno llama la absorción del stock acumulado de vivienda nueva, que en España se inició en 2010 y que en Ciudad Real también tiene esa fecha como inicio de la digestión del atracón de ladrillo que dejaron los primeros años del siglo, cuando se aprobaron casi 14.000 edificios nuevos cada año. En 2006, por ejemplo, sólo en septiembre se aprobaron tantos permisos para construir nuevas viviendas en la provincia como los que registraron los Colegios de Arquitectos Técnicos en todo 2018, 2019 y también en 2020.
En 2010, la provincia tenía 13.200 viviendas nuevas sin comprar; una década después hay 2.000 menos. Este descenso, sin embargo, no impide que Ciudad Real se mantenga en el 'pelotón' de las provincias de España donde se acumula más stock de vivienda nueva: El 3,78 por ciento del parque de viviendas de la provincia responde a la característica de que, a medida que las obras terminaban, se quedaban sin vender.
De hecho, en todos sus informes de la última década, el antiguo Ministerio de Fomento ha destacado a Ciudad Real como una de las zonas del interior con mayor stock de viviendas, junto a Toledo, La Rioja y Lérida, junto a otras de la costa mediterránea como Castellón, Almería y Alicante, además de Santa Cruz de Tenerife.
En España, el porcentaje de stock sobre el parque de viviendas es del 1,77%. Las comunidades autónomas con una acumulación de stock sobre su parque de viviendas superior al 3% son La Rioja y Castilla-La Mancha. La situación contraria se da en Navarra, Cantabria y Extremadura con un stock nulo, es decir, que necesitan empezar a construir ya, y el País Vasco con una acumulación inferior al 1%.