Pedir una hipoteca para mercar una casa es una labor difícil para los adolescentes españoles. Ya hace tiempo, los profesionales advierten de las graves secuelas del maltrecho mercado gremial español. Los trabajos temporales, los bajos salarios y la volatilidad hacen que el instante de mudarse a nuestra vivienda se retrase de forma considerable. Como explica iAhorro, este instante llega a los 35 años, una vez que los habitantes alcanzan un grado salarial que se estima suficiente para tolerar los costos cada vez más elevados del mercado inmobiliario.
No obstante, no todo el planeta se confronta a esto de la misma manera. Pues los pagos se disminuyen si la hipoteca o el alquiler se pagan conjuntamente o en pareja. No hace falta averiguar para enseñar que el alquiler, la hipoteca, las facturas o los costos son muchísimo más asequibles una vez que se comparten entre 2 personas. Ofrecer el paso hacia la libertad y realizarlo solo no es simple: "Independizarse en pareja acelera de manera considerable el proceso. Salir de vivienda solo es mucho más complejo, más que nada por la apariencia financiero", explica Simone Colombelli, directora de hipotecas de iAhorro.
Por cierto, los profesionales ya hablan de la llamada "Tasa exclusiva", el costo extra que una persona tiene que abonar una vez que festeja un contrato o compra un producto o servicio de manera personal: "Al consumir solo, se paga más", resumen los profesionales en la materia.
Y esto no solamente se aplica a los alimentos o a servicios como la electricidad o Internet. Además puede hallarse a grado financiero en productos como las hipotecas. "En la situación de la compra de una casa en solitario, varias entidades son más reticentes en el momento de destinar créditos por miedo a futuros impagos por parte del cliente. De esta forma, para que una persona sola, soltera o no, logre mercar una casa, tiene que llevar a cabo más requisitos que si la compra fuera conjunta", explica el comparador iAhorro. Y citan únicamente varias de ellas: tener más solvencia financiera, trabajo estable y constante o un aval bancario externo.
No son todos los inconvenientes, aceptan. Pues en los últimos meses "los bancos se han centrado en los adolescentes y les ofrecen productos más específicos, como hipotecas con más financiación (en ciertos casos del 90%)", explica Colombelli, que incorpora que una de las condiciones que tienen la posibilidad de llevar a cabo en la actualidad es la exigencia de solicitar una garantía a un tercero, que solamente podría ser válida a lo largo de unos 5 años de la vida de la hipoteca.